El villano del mes: El propio personaje

¡Llego a tiempo, aún estamos a 29! (Vale, no llego a tiempo para la entrada de el villano del mes de Marzo, pero para Abril aún estoy a tiempo). Empecemos:

Disclaimer (o como quiera que se diga en español) La imagen de este artículo desvela contenido crucialmente revelador de una de las películas premiadas de la última entrega de los Oscar. Si sabes de qué película hablo o si te da igual, ahora sí que sí que empezamos:

Cisne negro
Empecé a "oír" hablar de aquello de "el gemelo malvado" en el suplemento de Vampiro: La mascarada "Edad Victoriana" (súper prescindible), en que trataban el tema como algo presente en la literatura de la época (respecto al cual mi ignorancia sólo me trae a la mente "El extraño caso del dr. Jeckyl y Mr.Hide"); pero posteriormente he visto lo mismo en el cine en más de una ocasión, la última de ellas en Cisne negro.

El caso es que, pese a lo que el personaje principal de la película cree (y por tanto, el espectador), su enemigo no es tal, o mejor dicho, sí que lo es, pero no es quien cree que es, sino ella misma. Llega incluso a mantener una lucha con quien cree que es su némesis, en la que cree matarla, pero realmente lo que hace es clavarse a sí misma un trozo de espejo.

Otro ejemplo claro lo vemos en El club de la lucha (han pasado más de diez años desde su estreno, entiendo que todo el que quisiera ya la habría visto), donde el personaje encarnado por Edward Norton habla constantemente con su alter ego Tyler Durden, que es en realidad él mismo. En este caso también lucha físicamente contra él, lo que da un peso muy importante al poder de la percepción del personaje por encima de lo que esté sintiendo su cuerpo.

Pero, ¿cómo usamos ésto en nuestras partidas de rol? A pesar de que tenemos la ventaja de que podemos jugar con el trastorno/hechizo/loquesea del personaje para que interactúe e incluso luche contra sí mismo sin darse cuenta de ello, ocurre que las partidas de rol suelen darse generalmente con un grupo de personajes, y claro, cuando un miembro del grupo empieza a hablar consigo mismo y a responderse, el resto quizá se de cuenta.

Aquí tenemos dos opciones: o bien optamos por el clásico marveliano "lo hizo un mago", que aquí puede ser mismamente un mago, un virus o un supervillano con poderes psíquicos que se divierte con los personajes; o hacemos que los jugadores nunca se enfrenten directamente a su/s enemigo/s. Sencillamente se van a dormir y cuando despiertan alguien la ha liado parda. Aquí podemos dejar que sea uno sólo de los personajes el que tenga el trastorno de personalidad, o incorporar también la opción del mago y que el grupo entero se despierte sonámbulo a ponerse trampas a ellos mismos. Sé imaginativo.

También ten en cuenta que no pueden andar persiguiendo fantasmas toda su vida, en algún momento tendrán que enfrentarse a alguien. Para ello puedes hacer que el enemigo (bien sea uno sólo o el grupo entero) tenga sicarios, que por alguna razón nunca le han visto la cara. Puede que trate con ellos siempre por teléfono o correo, o que se disfrace cuando cambia de personalidad. De este modo tendrán algo a lo que enfrentarse mientras van tirando del hilo.

Aún así, por mucho que les entretengas, tarde o temprano llegarán al origen de todo. Aquí puedes dejar que se peguen un buen rato contra sí mismos (ya se arrepentirán de ello más adelante), que se hieran bastante y bien, y entonces, en el momento cumbre de la situación, les haces que se vean en el reflejo de un escaparate. O que el villano diga una vez más una frase que ha repetido durante toda la crónica (algo del tipo "no somos tan diferentes"), y entonces se hacen conscientes de ello.

En una película el mazazo emocional es suficiente para que la cosa acabe ahí, pero a lo mejor tus jugadores quieren desfogar su frustración con algo. Aquí de nuevo tú decides: les dejas que encuentren al villano que ha estado controlando sus mentes durante toda la partida, o les informas de que todo ha sido un producto de su imaginación, y les dejas con la frustración en el cuerpo. Depende de lo que aprecies a tus jugadores :P

2 comentarios:

  1. Que mal cuerpo te deja Cisne negro nen!

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  2. Mi hermana salió mosqueadisima del cine, creía que había ido a ver otra cosa xD

    Yo me hice un pj que tenía un alter ego, era una especie de demonio atado a su voluntad (ponle la literatura que quieras a esto) y solían tener peleas "internas" para controlar las acciones del cuerpo físico (en resumen, el pj era humano y le habían metido el alma de un demonio malvadáceo) Lo que más molaba eran las charlas y discusiones que tenían por hacerse la puñeta el uno al otro, uno por tentarlo y comerle la oreja (porque era lo único que podía hacer) y el otro por realizar buenos actos para irritar al demonio xD Molaba un montón ^_^

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