Maldito Rol: Ambientes: Mesa de juego

Esta mañana cuando me estaba dando el paseo friki de rigor he vuelto a ver la Mesa Sultan y me he puesto a babear de nuevo como el primer día. Y me he dado cuenta de que tan importante es tener una buena espada para matar orcos como una buena mesa de juego. Y de ahí comenzarán una serie de artículos de los que éste es el primero.

Creo que aún no lo he comentado, pero mi mujer es decoradora, lo que pone un poco complicado poner un trono para el Director de Juego, armas al alcance de la mano de los jugadores y vidrieras de nuestras gestas, por lo que no me pondré de ejemplo en ningún caso, y mucho menos en el tema de las mesas (en el que puede que incluso use mi caso como contraejemplo)

Quzá la mesa de juego en una partida de rol no sea el elemento que más ambiente aporta (sí en los wargames, lógicamente, pero de eso no nos ocupamos) pero sí es algo que bien cuidado puede ser muy de agradecer por parte de todo el mundo.

Aviso: Si tienes una buena mesa de juego corres el riesgo de que tu casa se convierta en la guarida friki de todos los fines de semana, avisados quedáis.

Hay varios aspectos que hacen de una mesa un buen lugar en que dar rienda suelta a cualquier aventura, pasaremos a analizarlos paso por paso:

Forma:
Lo ideal es que tenga forma de riñón como las mesas de poker, de modo que el Director de Juego pueda colocarse en la parte interior y esté a la misma distancia de todo el mundo manteniendo además la privacidad propia de su condición. Como eso no es siempre posible, mi recomendación es que sea redonda, porque las mesas rectangulares tienen el problema de que no todo el mundo está a la misma distancia y si el Director se sitúa en una de las cabeceras para poder tener todo su material alrededor sin enseñárselo a los jugadores, la gente del fondo no se entera de nada.

Tamaño:
Dependiendo del tamaño del grupo de juego habitual, la mesa ha de ser siempre capaz de alojar al número máximo de personas que se van a reunir en torno a ella. Si tu grupo de juego es de 6 personas, asegúrate de que entren cómodamente en la mesa, de modo que si lo normal es que uno o dos fallen no pase nada, pero que no sea necesario montar una mesa auxiliar los días que esté todo el mundo.

Espacio de almacenaje:
Existen mesas que tienen cajones incorporados, y si tienes la suerte de poder dedicar la mesa por entero a jugar, mi recomendación es que compres una de éstas. Tener los dados siempre localizados en un cajoncito es algo impagable cuando necesitas urgentemente 1d12 para hacer un ataque especial.

Estabilidad:
Puede parecer una tontería, pero es importante que tenga cuatro patas al menos. Yo cometí el error de comprar una mesa DOCKSTA de Ikea que sólo tiene una pata y cada vez que alguien va a borrar algo de su hoja de personaje ha de avisarnos a los demás para no movernos mientras escribimos. Un asco.

Aún así hay gente que no ha encontrado nada que satisfaga sus necesidades (o que directamente no quieren/pueden gastarse una barbaridad de dinero en comprarse una Sultan) y han decidido montársela por su cuenta. A continuación un par de enlaces:

Custom Game Table (Analógica y "digital" xD)

MJ harnish's version of Sultan

Spilth's D&D gaming table (A éste tío hay que envidiarle, pero no por la mesa en concreto)

Y ahora sí, la reina del tablero, la princesa del comedor, la magnífica MESA SULTAN: